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21 de agosto de 2019

Delgada línea entre la verdad oficial y las noticias falsas


Las “noticias falsas” se han convertido en la mayor amenaza para las sociedades y en paralelo existe una profundización en la libertad de expresión e información. ¿Qué es lo que está ocurriendo en este ecosistema?


En el 2016 el mundo occidental recibió como noticia que el Diccionario Oxford agregó un neologismo como palabra del año a “post-truth” o de la posverdad, cuyo significado “denota circunstancias en que los hechos objetivos influyen menos en la formación de la opinión pública, que los llamamientos a la emoción y a la creencia personal”.

El portal The Economist pudo definir: “(...) una confianza en afirmaciones que se 'sienten verdad' pero no se apoyan en la realidad”.

Puede afirmarse que existiría una relación íntima entre lo político y el matrimonio de la posverdad con las noticias falsas, con lo cual viene bien plantearse la hipótesis que el mayor generador de la desinformación es el gobierno.

Rosa Montero en su columna en el portal de El País, publica un artículo titulado “Borregos mentirosos” y asegura “O tomamos conciencia del peligro, desarrollamos planes nacionales contra la mentira organizada y empezamos a educar a los niños en el pensamiento crítico, o seremos los borregos más tontos de la historia humana, camino del matadero y balando mentiras todos a una.”

Este argumento tiene relación con el informe “Fake news y desinformación. Monopolios de la manipulación informativa” en el que se argumentan sobre el hecho de: limitar la libertad de expresión en culpabilizar al ciudadano del consumo de noticias falsas no solucionará el fenómeno de la desinformación. Pero también se pregunta “Pero ¿cuáles son los principales culpables de la propagación de las noticias falsas? Para la plataforma xnet-x.net, son los que gobiernan, los partidos políticos, los ‘medios de comunicación’ y las corporaciones.”

Pero Javier Benegas (disidentia.com) plantea otro escenario: “El verdadero peso estadístico de una noticia falsa está en su polémica, su discusión y sus consiguientes interacciones; no en la aceptación. Por más que se desconfíe de las redes sociales, no se puede tachar de locos a sus usuarios, ni siquiera a la mayoría de ellos. Y no por compasión, sino por simple improbabilidad estadística.”
Estos antecedentes sirven de marco para entender una parte de ese llamado ecosistema informativo en Ecuador.

El 24 de mayo de 2019 se puso en marcha un interesante ejercicio de verificación de la verdad oficial durante el informe a la Nación del Presidente de la República de Ecuador; el trabajo fue desarrollado por el equipo periodístico del portal ecuadorchequea.com y con el que se verificaron 19 aseveraciones, de lo cual se obtuvo el siguiente resultado: Cierto 8, Si, pero... 1, Insostenible 3 y Falso 7.

Pero existe otro proceso periodístico en que también tiene confrontaciones con la desinformación y noticias falsas: en las coberturas y la redacción de notas con, guste o no, la información on line contenida en boletines y difundida masivamente por redes sociales virtuales.

La experiencia me hace asumir que las versiones oficiales se han convertido en un acto de fe y muchas ocasiones los periodistas las hemos difundido tal cual nos llega desde las instancias del poder político, sean nacional o de los gobiernos locales; tal vez nos hace falta poner una expresión que podría convertirse en muletilla: información sujeta a verificación.

Otro colega tiene puntos de vista que abonan a este análisis es Arturo Torres, co-autor del libro Rehenes, cuando le consulto: ¿Qué tan complejo es para los periodistas verificar la información oficial antes de publicar? La respuesta es concreta: “Al tratarse de información oficial, en general, no necesita una verificación, porque es de una fuente directa que solo requiere ser atribuida.” 

Pero para la periodista de Oromar Televisión Wendy Menéndez existen otras aristas necesarias de considerar: “Se requiere de tiempo para poder confirmar los datos, es complicado saber si lo que se dice es cierto; por ejemplo, si se dan estadísticas o cifras se requiere ir a la fuente oficial si el entrevistado es vocero, en estos casos es recomendable tomar nota y escuchar bien las declaraciones para en lo posterior confirmar la información. El escenario cambia cuando asistes a una rueda de prensa conociendo los puntos que se van a tratar, se podría decir que ya vas armada (documentos y datos) para confirmar o descartar la veracidad de la información.”

Mientras que para Jaime Ugalde, periodista y Jefe de Ediasa, la situación no tiene una sola respuesta. “En general una información cercana es más sencilla. Se puede llegar al sitio, localizar documentos o buscar otras fuentes para confirmar. Ahora, es más viable, pero no siempre es sencillo, pues los funcionarios públicos muchas veces no entienden que ellos no son dueños de la información pública.”

Y a sus argumentos expone muestras cuando un acontecimiento ocurre en una región diferente al que normalmente se hace cobertura porque es “… un gran problema por los filtros, intereses y sistemas centralizados de difusión. Por ejemplo: en algún momento las autoridades del Gobierno dijeron que habían encontrado un micrófono en la embajada de Ecuador en Londres. En la práctica ningún periodista pudo ingresar a la embajada y comprobarlo, todos debieron limitarse a difundir una versión oficial y buscar reacciones.”

Wendy que realiza coberturas en Manabí, frente a las versiones oficiales asegura que “Las condiciones responden necesariamente a un interés, pueden ser personales o empresariales, lo que busca este tipo de información es manipular a la opinión pública sobre todo cuando atraviesan por una crisis o quieren llamar la atención de ciertos grupos.”

Así mismo pone un ejemplo: “Para entender las fake news y saber confrontar periodísticamente, se analiza y acude a las fuentes que se mencionan en los boletines, en ellos suelen mencionar a los beneficiaros de algún servicio detallando lo ‘complacidos’ que están, pero suele pasar que cuando acudes a ellos la realidad es otra, la obra inaugurada o el producto entregado no satisface las necesidades.”

Mientras tanto, Arturo con la experiencia de lo investigado en el caso del asesinato al equipo de El Comercio, indica que “la información que me han proporcionado algunas entidades públicas es incompleta, sesgada o está direccionada. Más que falsa es parcial, con lo cual hay un ocultamiento sobre temas sensibles.” Y Jaime concluye: “A más de contrastar y verificar, uno encuentra contradicciones cuando hace seguimiento. El seguimiento debe recuperar protagonismo.”

Del otro lado existe una manera de contrarrestar el trabajo periodístico y es un As político bajo la manga que raya en lo dogmático: “El Gobierno hace un llamado a la ciudadanía a informarse únicamente por fuentes oficiales.” Pero yo, por ahora, me quedo con lo mencionado en un tuit del periodista colombiano Daniel Coronell: Todo lo que diga un funcionario es falso hasta que se demuestre lo contrario.

Pero existe otra expresión que el público podría asumirlo: que se publique la información oficial no significa que se avale.

Publicado originalmente en La Verdad, edición 372, julio 2019


17 de agosto de 2019

Una lujosa joya artesanal para lucirla siempre

En la edición impresa No. 372 correspondiente a julio de 2019, La Verdad publicó mi crónica sobre lo que ocurre con los sombreros de paja toquilla de Montecristi, luego que termina el tejido; además, tiene datos de cómo hacer para que esta prenda tenga una larga vida.



Este es el texto de la publicación:

El sombrero de paja toquilla es una prenda de vestir mágica, sirve para el trabajo en el campo o la ciudad, en las grandes ocasiones o usarlo a diario, con la única condición: debe ser original y de fino acabado. Lo he comprobado con aquel que tengo por más de 20 años.

En la literatura sobre este tipo de sombreros se conoce más del tejido, del proceso de la paja y de quienes los tejen, pero hay un siguiente universo antes de comercializarlo: el acabado; también otro mundo cuando ya se es propietario de uno.

Mi viejo sombrero vino de las manos de María Mero y Pablo Franco, esposos que desde hace 25 años han perfeccionado el arte de venderlos, que empezaron con unos pocos y que en la actualidad calculan que habría podido comercializar no menos de 40 mil y que muchos están distribuidos por todo el mundo.

María y Pablo, mis buenos amigos allá en la centenaria ciudad de Montecristi, me condujeron por los caminos de entender que esta “joya artesanal” se convirtió en un símbolo de identidad y de glamour, de un estilo de vida y crecimiento empresarial.

Fue María quien me enseñó la manera de azocar los sombreros, de hacer el ribeteado y de la importancia del acabado para que tengan la textura y buena imagen; Pablo, en cambio, me entrenó en un trabajo al que siempre lo llame: “Planchar con fuerza para no dañar”, que es la parte final antes de exhibirlo sensualmente y que atraiga a un comprador.

De entre las tantas historias que durante más de 10 años me contaron fueron las de los problemas cuando el sombrero se ensucia o por algún mal trato pierde la forma; la solución es llevar al sombrero hasta el local de la familia Franco – Mero, para que reciba el mantenimiento del caso y quede como nuevo.

Quizás para pase inadvertido uno de los servicios fundamentales que los esposos ofertan cuando venden un sombrero: recomendaciones para su buen uso, pues la experiencia les demostró que muchos tenemos malas prácticas al ponernos o sacarnos el sombrero, lo cual provoca daños irreparables; también la manera de guardarlo o lo que debemos hacer cuando se nos moja por alguna razón.

El buen y original sombrero de paja toquilla, soporta sol, vientos y lluvias, que lo he comprobado en los distintos viajes y trajines a los que lo he llevado. Pero aún falta más en la crónica de estas joyas.

La historia de los artesanos no se ha quedado en páginas de publicaciones nacionales, pues entre los tesoros que guarda Pablo, está la revista china en que se publica un reportaje sobre su trabajo y sus productos.

El espíritu empresarial no los dejó estancarse en el simple comercio, pues los Franco – Mero dieron otro paso fundamental que los llevó a internacionalizar su negocio con la estrategia “Denominación de Origen” que cuando Usted, amable lector, compre un sombrero le entregarán el certificado legal de su sombrero que avala calidad y lugar en que fue comprado. Es un valor agregado impresionante.

Como acotación: en Ecuador solo cinco productos tienen la marca Denominación de origen: Sombreros de Montecristi, café de Galápagos, Cacao Arriba, Maní Transkutukú y la pitahaya de Palora.

Certificado avalado y con datos personalizados que se entrega cuando una persona compra un sombrero de paja toquilla.
Pues bien, internacionalizar también implica exportar, un nuevo paso de la gran empresa llamada “MonteEcuador Hats” que dio el gran salto en el mundo de las finanzas y ahora tiene su propia tienda virtual; también cuando llega al lugar y luego de probarse algunos sombreros y decide comprarse uno, puede pagar con tarjeta de crédito o algún otro tipo de transacción financiera virtual.

Cuando leen estos párrafos podrían imaginar que estoy haciendo publicidad, pues en una parte sí, pero es que no hay otra manera de expresar el cómo Pablo y María, con sus hijos, desarrollaron su gran empresa con características internacionales.

A propósito de sus hijos y publicidad, quien está a cargo de toda la parte on line es Bryan Franco Mero, su primogénito, que en la misma tienda tiene su espacio para actualizar tanto la página Web como las distintas cuentas en redes sociales; además, es apoyo en estos intrincados mundos de la tecnología aplicados a las ventas de originales sombreros de paja toquilla.
Bryan Franco, encargado de los aspectos on line en la promoción y venta de sombreros de paja toquilla.
Pero si en este punto consideran que el camino ya es cuestión de recorrerlo, comentaré que no; porque deben enfrentar un problema, al igual que otros artesanos de la zona, que es la venta de sobreros “baratos y de mala calidad” haciéndolos pasar por originales. Esta situación ha sido evidente cuando en algunos eventos públicos tanto del sector privado como público, se han obsequiados sombreros como un símbolo y se distingue fácilmente o que son falsos o de aquellos que se fabrican industrialmente.

Me gustaría cerrar aquí esta crónica, pero me es imposible debido a que existe un componente histórico - humano que en papeles se perdió. Se trata de María Elvira López Mero, la primera generación de esta familia de artesanos y madre de Pablo. Pues, allá por el 2006, fue ella la tejedora manabita que posó para un sello postal que emitió Correos de Ecuador. Las fotos y demás papeles que sustentan este recuerdo se han extraviado, pero con Pablo nos hemos puesto de acuerdo para recuperarlos. Ojalá que pronto tengamos noticias.
María Elvira López Mero, la foto que fue usada para un sello postal y que ahora es insignia de esta empresa artesanal.

Puedo ahora hacer un alto de un breve relato sobre esta joya de Ecuador y lo hago con el orgullo que tengo al ser poseedor por más de 20 años de uno de esos más de 40 mil sombreros de paja toquilla originales en que los Franco – Mero pusieron sus esfuerzos.

16 de agosto de 2019

Una breve crónica militar de Ecuador

Como un nuevo aporte al proceso de mantener viva la historia del GFE 111 "Rayo" - PUMAS, se trabajó en un vídeo que tiene como base el reconocimiento militar a quienes fuimos parte de esa unidad, que completamos el curso de comandos israelitas y el cual nos permitió oficialmente llevar la Boina Verde.
PUMAS Paracaidistas:  Roberto Bustamante, Fernando Vega, César Montenegro, Byron Sosa y Raúl Zavala.
Gracias a una gestión personal y al apoyo del colega Yerson Palma, fue posible producir un vídeo que sintetiza la importancia histórica tanto de la creación y acción del curso propósito especial PUMA, de la misión del Grupo de Fuerzas Especiales 111 "Rayo" y su influencia en las unidades del Ejército, Marina y Aviación; así como del reconocimiento especial del que fuimos objeto en la conmemoración del Día de la Independencia el sábado 10 de agosto de 2019, en el Parque de la Armada - Guayaquil.


PUMAS -"Boina Verde" en el contexto histórico from Zavala _Ra on Vimeo.

14 de agosto de 2019

Objetivos y misiones militares del GFE No. 111 "Rayo" - PUMAS

El 10 de agosto de 2019, el Crnl. E.M. (SP) Eduardo Vergara, agradeció Fuerzas Armadas a nombre de quienes tuvimos un reconocimiento especial e histórico en calidad de "Boina Verde" de Ecuador.

Crnl. (SP) Eduardo Vergara, “Subagrupamiento  táctico Tiwintza
A continuación la transcripción del discurso en el que se sintetizan las razones y resultados del Grupo de Fuerzas Especiales 111 "Rayo" - PUMAS, en el contexto militar y de la guerra:


Al estar presentes aquí, junto al histórico buque Armada del Ecuador Calderón, llamado así desde 1950 en honor al militar cuencano Abdón Calderón, combatiente y héroe de la “Batalla del Pichincha”, nos llena de orgullo, porque nuestra Marina de guerra tiene entre sus hazañas históricas, la de un 15 de julio de 1941, en donde, éste buque insigne, llamado inicialmente Cotopaxi, se vistió de gloria, en el combate de Jambelí, ante la Armada peruana.

La guerra nació y ha convivido con el hombre a través de los años, ésta ha sido siempre una solución impulsiva de los diferendos en disputa y nuestro país no podía estar exento de aquellos problemas territoriales.


Corría el año de 1941 y el Perú invadió la provincia de El Oro, en los sectores de Chacras, Carcavón, Huaquillas, Arenillas, Quebrada Seca y Machala, ante la escasa fuerza militar en defender nuestra frontera. Firmándose en 1942 aquel irrito y nefasto Protocolo de Río de Janeiro.

En 1981 Perú vuelve con sus ambiciones expansionistas y ataca los destacamentos ecuatorianos de Paquisha, Mayaicu y Machinaza en la Cordillera del Cóndor. Superior en personal, material y medios cumple con sus objetivos pese a la tenaz resistencia de los soldados ecuatorianos.

Ante esta situación, el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas ecuatorianas al mando del Sr. General Luis Piñeros con una visión muy clara, decide formar una fuerza élite en su organización; y traen al Ecuador, a dos instructores comandos israelitas, de un país  de los más prestigiosos del mundo, en acciones bélicas, fueron el Mayor Itssi y el Capitán Rass, militares de combate y con gran trayectoria profesional en Israel; designando a ocho oficiales del Ejército y cinco de la Marina, cuyo curso se llevó a efecto en el litoral ecuatoriano, con base en Salinas y tuvo una duración de un año, con el nombre de “Propósito Especial Pumas”; teniendo como misión, formar conductores en operaciones contra objetivos estratégicos del enemigo. 

Los militares ecuatorianos nos preparamos en infiltraciones aéreas terrestres y marítimas en la retaguardia profunda del enemigo, en general nos especializamos de manera técnica y profesional en el arte de la guerra. 

Los oficiales graduados en este curso fuimos los responsables de organizar un ciclo de entrenamiento similar, para el personal de oficiales y voluntarios de las tres ramas de las Fuerzas Armadas, soldados de tierra, mar y aire, formados en la dureza del hierro, con ejercicios de fuego real, soldados con verdadera mística profesional.

El soldado PUMA y autor de este blog Raúl Zavala, y el Crnl. (SP) también PUMA Eduador Vergara.
Posteriormente, el Comando Conjunto tomando como base el personal adiestrado en los cuatro cursos de pumas, decidió la conformación del Grupo de Fuerzas Especiales 111 “Rayo”, llegando a constituir en su debido tiempo, la reserva estratégica del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas; y en que nuestras misiones como es de vuestro conocimiento, tenían boleto de ida, pero no de retorno.  

En 1986 por situaciones de mezquinos intereses, de gente detractora de la misma institución, hicieron que nuestro grupo desaparezca físicamente, regresando a sus respectivas fuerzas el personal de la Marina y de la FAE; con el personal del Ejército se forma al GFE No. 24, grupo que mantiene aquellas enseñanzas de la guerra, de aquellos comandos israelitas y que quedó sembrado en terreno fértil; sus tácticas y técnicas que se expandió en toda nuestra institución, porque los “PUMAS”, fuimos a las diferentes brigadas y unidades militares del país impartiendo nuestros conocimientos aprendidos en el combate.

Sus frutos lo veríamos años más tarde en el conflicto armado con el Perú en 1995, en el Cenepa y los verdaderos artífices de aquella epopeya histórica, son y serán, nuestros mandos medios de oficiales, voluntarios, reservistas y conscriptos empleados en primera línea de fuego. En donde inicialmente el glorioso GFE No. 24 bajo mi mando y posteriormente como comandante del “Subagrupamiento  táctico Tiwintza”, defendimos en primera línea de fuego la heredad territorial, en los sectores de Tiwintza, El Maizal, Montañita, la “Y”, Base Sur, La Piedra, y tantos otros sagrados lugares de nuestra amazonia; alcanzando un triunfo militar histórico, reconocido más tarde por militares peruanos y su prensa, por lo que debemos sentirnos muy orgullosos el haber sido parte de la conformación inicial de este grupo de soldados profesionales.

Como vemos su historia es corta en el tiempo, pero conjuntamente con aquella legendaria BFE No. 9 “Patria”, cuna de héroes, baluarte de nuestra nacionalidad ecuatoriana y nuestra gloriosa Fuerza Aérea, es muy trascendental en sus acontecimientos, ya que se logró transformar, la historia militar ecuatoriana.

Es menester recordar en esta mañana a sus autoridades, que luego de haber transcurrido un cuarto de siglo de aquella gesta heroica del Cenepa, nosotros no buscamos la gloria, porque ya lo alcanzamos, como verdaderos soldados, con fusil en mano y en el campo de batalla, en donde rescatamos el honor y la dignidad nacional; pero si está pendiente que se haga justicia, con sus verdaderos soldados que lucharon sin temor y con sus pechos henchidos de patriotismo en el campo de combate, ya es hora de que se transparente nuestra historia con sus auténticos protagonistas.

A nombre de todos quienes conformamos el histórico GFE 111 “Rayo”, deseo agradecer al Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas por este reconocimiento que se nos otorga en esta fecha histórica del 10 de agosto, ya que los pueblos que olvidan su verdadera historia, son pueblos que tienden a desaparecer.
Señoras y señores…


Enlaces de referencia: 





13 de agosto de 2019

Reconocimiento a los "Boina Verde" de Ecuador

La magnitud del evento sobrepasó las expectativas. Más de tres décadas tuvieron que pasar para conocer el significado y significante de una especialización militar en Ecuador, muy a pesar que se encuentra latente en las unidades del Ejército, la Marina y Aviación.


Fue la mañana del 10 de agosto del 2019, al Parque de la Armada, ciudad de Guayaquil, más de 100 soldados de fuerzas especiales llegaron al ser convocados por quienes en un momento estuvieron al mando del GFE 111 "Rayo", la razón: El Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, por intermedio de la Armada del Ecuador, tomó la decisión de realizar un reconocimiento especial para quienes luego de completar un curso de comandos israelitas se ganaron el derecho a usar la Boina Verde.

La cadena Oromar Televisión recogió la información:



En esta ceremonia fue el Crnl. E.M. (SP) Eduardo Vergara, quien a nombre de los PUMAS y como héroe de guerra al estar al mando de las tropas que defendieron el Cenepa, agradeció al mando militar por la distinción ofrecida y en una parte de su discurso expresó:

“Es menester recordar en esta mañana  a sus autoridades, que luego de haber transcurrido un cuarto de siglo de aquella gesta heroica del Cenepa, nosotros no buscamos la gloria, porque ya lo alcanzamos, como verdaderos soldados, con fusil en mano y en el campo de batalla, en donde rescatamos el Honor y la Dignidad Nacional; pero si está pendiente que se haga justicia, con sus verdaderos soldados que lucharon sin temor y con sus pechos henchidos de patriotismo en el campo de combate; ya es hora de que se transparente nuestra  historia con sus auténticos protagonistas."

 "A nombre de todos quienes conformamos el histórico Grupo de Fuerzas Especiales No 111 'Rayo', deseo agradecer al Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas por este reconocimiento que se nos otorga en esta fecha histórica del 10 de agosto, ya que los pueblos que olvidan su verdadera historia, son pueblos que tienden a desaparecer”.

Texto del reconocimiento recibido por el autor de esta entrada:


Por su parte el portal de diario el Comercio, que también recogió las incidencias del evento, publicó:

"Por los 210 años del Primer Grito de la Independencia, que se conmemoran este sábado, las Fuerzas Armadas rindieron homenaje con una ceremonia cívica. En esta ocasión se otorgó un reconocimiento al Grupo de Propósito Especial Pumas. El grupo de inteligencia, creado en los años 80, tenía como objetivo atacar en conflictos armados por mar, tierra y aire a objetivos específicos y debilitar su combate. Su lucha se visibilizó en el enfrentamiento con el Perú en 1995 en el Cenepa. Por ello, en esta ocasión se reconoció la labor de 131 soldados además de exaltar a aquellos que perdieron la vida en batalla." Para leer la nota completa AQUÍ